- En Quilpué, vecinos alzaron la voz contra una residente, que al tener relaciones, emite unos ruidos nada agradables para una familia con niños.
El “¡ay, ay, ay!” de una vecina tiene a medio Quilpué de cabeza. Tanto así que varios residentes de la zona han decidido denunciar a la dama en cuestión, pues sus sonidos de amor son estridentes y se pueden escuchar a varios metros del epicentro donde se producen.
Según medios de la región, los vecinos ya no hayan como explicar a los más pequeños que sonidos y la causa que los producen, pues no encuentran palabras para hacérselos saber.
“Los niños preguntan qué pasa y no sabemos cómo explicarles”, exclamó un vecino de la comunidad de Belloto Sur.
Es tan grave el asunto que los vecinos han pedido ayuda a los Carabineros para que pidan que la dama baje los decibeles cada vez que tiene prácticas sexuales.
“Se efectuó un reclamo por ruidos molestos, pero cuando (los carabineros) vinieron, no pudieron hacer nada porque la persona estaba en el espacio de su vivienda, un espacio privado”, comentó uno de los residentes a un medio de Quilpué.
La situación se viralizó en la cuenta de Facebook Alerta V Costa, donde se subió un video que deja en evidencia los gritos de la denunciada.
Una madre acusa que los ruidos afectan a sus hijos “porque mantienen ventanas abiertas cada vez que están teniendo relaciones y eso perturba a sus hijos menores de edad como a los hijos de los vecinos”.
“Se le ha pedido que sea más reservada porque los niños preguntan qué pasa y no sabemos cómo explicarles. Nunca nos ha dado la cara, porque nunca abre la puerta. Es una situación que lleva meses”, afirmó una residente del lugar.
Entretanto otro vecino expuso que afirmó que la mujer tiene actitudes exhibicionistas.
“Es como una actriz porno porque no sólo abre las ventanas cuando está teniendo sexo, sino que también las cortinas, a todo lo que dan. Por eso se puede ver todo y ahora como se oscurece más temprano, es peor. Esperemos que pare, está bien que tenga vida íntima, pero parece motel”, dijo.
